Comenzaremos manifestando que las elecciones en EEUU, siempre resultan un tanto dificultosas y complejas, para quienes somos consultores de la opinión pública, por cuanto el sistema electoral además de complicado para el elector, no depende de la votación popular sino que es un sistema de elección indirecta. Es un juego de reglas, condiciones, participación, elegibilidad, tiempo para hacer una cosa y la otra, llenar vacantes, reelecciones, renuncias, elección cada dos años, cada cuatro, cada seis, renovaciones en los mismos lapsos, todo esto para elegir senadores, congresistas y gobernadores en legislativas. Una auténtica locura con tinte de despelote. Un enredo total para el elector estadounidense.
Si no se tiene una mecánica para la recolección de datos optima, y una correlación de todas las variables posibles en el contexto electoral, es muy probable que una encuesta no logre el objetivo de acertar. Por ejemplo, la votación popular solo sirve para cada estado, cuando el evento es presidencial, porque el candidato ganador así sea por un voto en ese estado, se llevaría todos los votos electorales, pero la votación nacional si la obtuviera, no le sirve para ser electo presidente sino cuenta con la mayoría de esos votos electorales, en cambio en las legislativas la votación es en cada estado de forma uninominal, siendo así se necesitaría medir y consultar entonces, imagínense ustedes, para que noten lo torpe y engorroso de este sistema, a cada congresista candidato a la cámara baja en cada estado, los cuales en el País son (435), lo que constituiría realizar un censo y no una encuesta, luego promediar cada valor o porcentaje de cada candidato, algo impráctico y oneroso, que involucra tiempo y costos de realización, por esta vía resulta algo irreal e improcedente, claro, se puede consultar el voto en busca de la preferencia, si desea votar por los candidatos demócratas o republicanos y se sale fácilmente del problema, es la solución más práctica y aconsejable.
Todo esto hace un poco difícil el pronóstico para las encuestadoras en USA, de allí que quien no tenga una experticia técnica y científica, acompañada de mecanismos estadísticos apropiados y novedosos le resultaría muy difícil pronosticar en las elecciones de EEUU. Nosotros asumimos este reto con la misma normalidad como lo hemos hecho en otros países como Colombia y Brasil, y estamos convencidos que estaremos acertando en las elecciones legislativas de EEUU.
En las presidenciales del 2016 entre Donald Trump frente a Hillary Clinton, casi todas, una gran mayoría de las encuestadoras norteamericanas le dieron la primera opción a Clinton. Al final de todo, si no hay una capacidad técnica profesional y de experiencia en el menester, que permita alcanzar, perfilar y concretar un mecanismo robusto lo más ajustado posible, a lo que ha de ocurrir este 06 de noviembre del 2018 en las elecciones legislativas de EEUU, cualquier investigación de opinión pública, que se haga enmarcada entre los parámetros que exige el sistema electoral estadounidense no alcanzará el éxito deseado.
QUE SIGNIFICAN LOS VOTOS ELECTORALES EN CADA ESTADO
Es un número constitucionalmente
establecido en cada estado por la cantidad de habitantes que ese estado tiene.
Esa distribución da el número de congresistas que cada estado deberá elegir, y a
ese número resultante se le llama “VOTO
ELECTORAL”. Cuando dicen por ejemplo que el estado de Texas tiene (38)
Votos electorales, quiere decir que elegirá (36) diputados a la cámara baja y
dos senadores, eso da (38) votos electorales. Cada estado elige fijo (2)
senadores sin importar su cantidad de habitantes. Si un candidato gana este
estado Texas aunque sea por un voto el día de las elecciones, ese
candidato habrá ganado los (38) VOTOS ELECTORALES en disputa en Texas, aunque en ese
estado se dividan un senador para cada opción (republicano y demócrata).
Por qué se eligen (100) senadores?
Porque son (50) estados en EEUU lo cual genera la elección de (100) senadores, y la constitución establece una paridad de elegir dos por cada entidad, enmarcado esto en las regulaciones del sistema electoral norteamericano desde hace varios siglos. Ojo, no se toma en cuenta en este caso el peso habitacional o poblacional de cada estado, por cuánto es una asignación automática de elegir dos senadores por cada uno de ellos. Así de sencillo.
Caso contrario ocurre con la elección de los congresistas, en donde la población o cantidad de habitantes, es la razón fundamental para su distribución y asignación por entidad o estado.
Por qué se eligen (100) senadores?
Porque son (50) estados en EEUU lo cual genera la elección de (100) senadores, y la constitución establece una paridad de elegir dos por cada entidad, enmarcado esto en las regulaciones del sistema electoral norteamericano desde hace varios siglos. Ojo, no se toma en cuenta en este caso el peso habitacional o poblacional de cada estado, por cuánto es una asignación automática de elegir dos senadores por cada uno de ellos. Así de sencillo.
Caso contrario ocurre con la elección de los congresistas, en donde la población o cantidad de habitantes, es la razón fundamental para su distribución y asignación por entidad o estado.
En
la carrera por la presidencia, el candidato demócrata o republicano tiene que
pelear por ganar la mayoría de los votos populares en cada estado, y no por el
voto nacional popular (aunque, por lo general, el ganador de las elecciones tiene
la mayoría del voto popular en el país).
Los
estados más poblados tienen más congresistas que los menos poblados, ya que son
elegidos por representación popular. Por ende, los estados más poblados tendrán más electores o
votos electorales de los cuales ya hablamos y explicamos.
A su vez, todos los estados tienen dos senadores en la Cámara alta, por lo cual cada estado tiene asegurado dos electores y los votos electorales. Por ejemplo, California tiene 55 votos electorales: 53 electores por la cantidad de congresistas que ese estado tiene y dos electores por los senadores. Texas tiene 34 votos electorales, eso quiere decir que tiene 32 congresistas y dos senadores. Carolina del Sur, que es un estado menos poblado, tiene ocho votos electorales, seis serían por los congresistas y dos por los senadores.
A su vez, todos los estados tienen dos senadores en la Cámara alta, por lo cual cada estado tiene asegurado dos electores y los votos electorales. Por ejemplo, California tiene 55 votos electorales: 53 electores por la cantidad de congresistas que ese estado tiene y dos electores por los senadores. Texas tiene 34 votos electorales, eso quiere decir que tiene 32 congresistas y dos senadores. Carolina del Sur, que es un estado menos poblado, tiene ocho votos electorales, seis serían por los congresistas y dos por los senadores.
LA ESENCIA DEL VOTO PRESERVA LA DEMOCRACIA EN USA
La elección presidencial por ejemplo, es una votación indirecta. Los electores votan y eligen ciudadanos en su estado denominados votos electorales, y estos a su vez electos, automáticamente eligen al presidente. Estos votos electorales no es más que un número de representantes (candidatos) otorgados a un estado según su población.
Muchos se quejan fuera de EEUU que no existe elección popular, y cabe destacar al respecto, que cuando se abre un proceso electoral al voto directo, los electores pueden expresar la incultura en toda su variedad, y esta puede elegir a cualquier gobernante mediocre e incapaz, e incluso hasta elegir a un dictador. Claro es un derecho humano inviolable y hay que escuchar su opinión, pero también es un alto y peligroso riesgo que se asume, dejando toda la responsabilidad en ellos de escoger libremente.
Si la cultura, la tecnología, el avance, el progreso y desarrollo de un pueblo tienen niveles altos, es más difícil que llegue al poder un gobernante mediocre, aunque puede llegar por otras circunstancias, pero si la cultura predominante es primitiva, indígena o colonial, tengan la plena seguridad que esos pueblos estarán signados a tener por años a gobernantes incapaces e indeseados.
De este mal se cuidó Estados Unidos desde hace siglos, por eso tienen y perdura una democracia sólida, por supuesto soportados por un sistema de elección seguro, práctico y enmarcado en un esquema electoral de gran fortaleza, robusto y equilibrado, aunque a la postre sea engorroso y complejo al momento de su operatividad y ejecución.
EL REGISTRO PREVIO PARA VOTAR, CONTRIBUYE A LA ALTA ABSTENCIÓN
Para votar en EEUU hay que registrase previamente, sin embargo hay algunos estados en donde el elector se registra el mismo día de las elecciones. Este registro aleja a muchos jóvenes de las urnas, porque consideran que el sistema hace del voto algo laborioso y tedioso, lo que a su vez ocasiona que en las elecciones de término medio como estas, que son antes y después de las presidenciales, no acudan muchos electores a votar y la participación sea la mitad de los inscritos, es decir entre un 50 y 55%.
El sistema de votación complicado y el registro previo para
tener derecho al voto, contribuyen enormemente a estas deserciones en las
urnas, y hacen de las legislativas en EEUU un evento de poca importancia para
la ciudadanía.
En EEUU existe una “votación anticipada” que también cuenta y es toda una novedad del sistema electoral norteamericano.
En EEUU existe una “votación anticipada” que también cuenta y es toda una novedad del sistema electoral norteamericano.
UNA
NOTA CURIOSA QUE VALE LA PENA DESTACAR
Existe
una fuerza republicana en varios estados que estableció un registro electoral
histórico, cuidado con esto porque puede inclinar la balanza hacia los
republicanos.
La elección de Trump en el 2016, marca la primera vez desde el 2000, en que el partido en oposición al candidato presidencial elegido o reelegido, gana en el Senado.
Ha sido esta elección del 2016, la primera y única elección desde la aprobación de la Decimoséptima Enmienda en 1913, donde el partido ganador en cada elección del Senado, reflejó el partido ganador por su estado en las elecciones presidenciales. Esto ocurrió en las elecciones ganadas por Donald Trump. Es decir, los estados que dieron su apoyo íntegro con sus votos al candidato Donald Trump y ganó las elecciones, todos ellos votaron por los candidatos a senadores del partido republicano (Donald Trump) en esos estados. Este evento casi está reciente, pues solo han transcurrido apenas dos años, si el fervor aún se mantiene en estos estados hacia Donald Trump, esto aniquilará todas las esperanzas de los demócratas en ganar el senado o cámara alta.
La elección de Trump en el 2016, marca la primera vez desde el 2000, en que el partido en oposición al candidato presidencial elegido o reelegido, gana en el Senado.
Ha sido esta elección del 2016, la primera y única elección desde la aprobación de la Decimoséptima Enmienda en 1913, donde el partido ganador en cada elección del Senado, reflejó el partido ganador por su estado en las elecciones presidenciales. Esto ocurrió en las elecciones ganadas por Donald Trump. Es decir, los estados que dieron su apoyo íntegro con sus votos al candidato Donald Trump y ganó las elecciones, todos ellos votaron por los candidatos a senadores del partido republicano (Donald Trump) en esos estados. Este evento casi está reciente, pues solo han transcurrido apenas dos años, si el fervor aún se mantiene en estos estados hacia Donald Trump, esto aniquilará todas las esperanzas de los demócratas en ganar el senado o cámara alta.
¿QUIENES TIENEN EN ESTA OCASIÓN LA CARGA
ELECTORAL IMPOSITIVA MÁS FUERTE, LO QUE SE TRADUCE EN UN ALTO RIESGO DE PERDERLO TODO?.
Esta
carga del cual hablamos, es alterna, y se corresponde con una dinámica que la
imponen variados factores sobre ambas opciones, pueden ser reelecciones,
llenado de vacantes, vencimiento de ejercicio, etc. Es un cúmulo de situaciones
que tanto demócratas como republicanos conocen y aceptan, porque es parte del
sistema electoral y las condiciones de elegibilidad.
En el 2016 por ejemplo, el peso mayor lo tuvieron los republicanos, pero esto se sumó a una campaña electoral que de por si motivó al electorado a ir a las urnas, y por otro lado el vencimiento de la imagen de Obama, un sentimiento popular de cambio de gobierno que afloró por cansancio, fatiga, ganas de tener un nuevo gobierno diferente, en fin, etc. Obama ya no tenía ni músculo electoral, ni músculo político, y a esto se le adicionó la candidatura fría en insípida de Hillary Clinton, que para muchos analistas no debió ser la candidata.
Los demócratas tenían la ventaja de contar con el poder, lo tenían todo a su favor, y en las defensas de elegibilidad, la tenían más suave que los republicanos en ese 2016, porque la carga gruesa, difícil e impositiva la tenían los republicanos. Con todo y eso no fueron capaces de ganar, porque Donald Trump arrasó con todo.
En el 2016 a los demócratas les tocó defender solo (10) escaños de sus senadores, es decir volver a competir electoralmente frente al republicano, y volver ganar para ratificar a ese senador, mientras que a los republicanos les tocó defender (24) escaños de sus senadores, es decir, que (24) senadores debieron ir a elecciones frente al demócrata, y ganar para poder ratificarse y quedarse con el escaño o curul.
En esa ocasión fue difícil para los republicanos. Esta es la carga impositiva y el factor riesgo del cual hablamos, el riesgo de perder varios senadores por tener que acudir a nuevas elecciones, para poder ratificar lo que tienen y que ganaron en el 2016. Esto de ratificar senadores no es fácil.
En el 2018 la cosa es al revés, los demócratas deberán arriesgar, defender y volver a ganarle a los republicanos, en (24) estados que serían (24) escaños o curules, para poder ratificar a esos senadores. Este es el gran reto para los demócratas, nada fácil. Además de esos (24) escaños que buscarán ratificar, (10) de ellos son en estados que ganó Donald Trump en el 2016, más difícil aún la cosa. Los republicanos solo deberán defender (9) escaños en territorios todos ganados por Donald Trump, esto es más fácil. Las probabilidades de que los demócratas ganen en estos estados republicanos son bastante mínimas, casi nulas, lo que le da amplia ventaja a Donald Trump de ganar con los republicanos la Cámara Alta del Senado.
En el 2016 por ejemplo, el peso mayor lo tuvieron los republicanos, pero esto se sumó a una campaña electoral que de por si motivó al electorado a ir a las urnas, y por otro lado el vencimiento de la imagen de Obama, un sentimiento popular de cambio de gobierno que afloró por cansancio, fatiga, ganas de tener un nuevo gobierno diferente, en fin, etc. Obama ya no tenía ni músculo electoral, ni músculo político, y a esto se le adicionó la candidatura fría en insípida de Hillary Clinton, que para muchos analistas no debió ser la candidata.
Los demócratas tenían la ventaja de contar con el poder, lo tenían todo a su favor, y en las defensas de elegibilidad, la tenían más suave que los republicanos en ese 2016, porque la carga gruesa, difícil e impositiva la tenían los republicanos. Con todo y eso no fueron capaces de ganar, porque Donald Trump arrasó con todo.
En el 2016 a los demócratas les tocó defender solo (10) escaños de sus senadores, es decir volver a competir electoralmente frente al republicano, y volver ganar para ratificar a ese senador, mientras que a los republicanos les tocó defender (24) escaños de sus senadores, es decir, que (24) senadores debieron ir a elecciones frente al demócrata, y ganar para poder ratificarse y quedarse con el escaño o curul.
En esa ocasión fue difícil para los republicanos. Esta es la carga impositiva y el factor riesgo del cual hablamos, el riesgo de perder varios senadores por tener que acudir a nuevas elecciones, para poder ratificar lo que tienen y que ganaron en el 2016. Esto de ratificar senadores no es fácil.
En el 2018 la cosa es al revés, los demócratas deberán arriesgar, defender y volver a ganarle a los republicanos, en (24) estados que serían (24) escaños o curules, para poder ratificar a esos senadores. Este es el gran reto para los demócratas, nada fácil. Además de esos (24) escaños que buscarán ratificar, (10) de ellos son en estados que ganó Donald Trump en el 2016, más difícil aún la cosa. Los republicanos solo deberán defender (9) escaños en territorios todos ganados por Donald Trump, esto es más fácil. Las probabilidades de que los demócratas ganen en estos estados republicanos son bastante mínimas, casi nulas, lo que le da amplia ventaja a Donald Trump de ganar con los republicanos la Cámara Alta del Senado.
UNA ESTRATEGIA DE TRUMP QUE LE PUEDE DAR
GRANDES DIVIDENDOS.
Utiliza
a Venezuela
para meter miedo, asustar y espantar al electorado estadounidense en su
campaña. Venezuela en la campaña de Trump, “es el coco que asusta al niño si no
se come la comida. somos el mal ejemplo de lo que no se debe hacer, algo feo y
terrible”.
La campaña de asociación comparativa entre los llamados demócratas estadounidenses, con los socialistas venezolanos le puede generar grandes frutos. En Brasil por ejemplo Jair Bolsonaro, hizo una asociación en su campaña de socialismo con comunismo comparándolo con Venezuela, y eso le generó un vuelco hacia él de casi todo el electorado brasileño, pues a la gente le da miedo el cuadro dantesco venezolano. Bolsonaro derribó y minimizó al gigante PT (Partido de Lula), al liderazgo de Lula y Dilma Rousseff, hechos estos ocurridos en las recientes elecciones presidenciales de ese País.
En USA, el presidente Donald Trump hace lo mismo, tiene en boca a Venezuela en todos los estados que visita en campaña, y no deja de expresar que los demócratas son comunistas, que hay que evitar que EEUU se vuelva otra Venezuela, sin comida, sin respeto a derechos humanos, sin persecución, hambre, miseria, migración, etc. Dicho en otras palabras, nuestro país es el coco para el niño cuando no quiere probar la comida. Venezuela es pintada como algo tenebroso, feo y oscuro para jamás ser visitado, en eso hemos quedado en el Mundo, para que nos tomen de muestra del mal ejemplo. Así son las cosas, más claras y evidentes imposible.
En EEUU esta comparación o símil como estrategia electoral, le está dando un gran empuje a los candidatos republicanos de Donald Trump en su campaña por el senado, los representantes de la cámara baja y los gobernadores que se elegirán este 6 de noviembre.
La campaña de asociación comparativa entre los llamados demócratas estadounidenses, con los socialistas venezolanos le puede generar grandes frutos. En Brasil por ejemplo Jair Bolsonaro, hizo una asociación en su campaña de socialismo con comunismo comparándolo con Venezuela, y eso le generó un vuelco hacia él de casi todo el electorado brasileño, pues a la gente le da miedo el cuadro dantesco venezolano. Bolsonaro derribó y minimizó al gigante PT (Partido de Lula), al liderazgo de Lula y Dilma Rousseff, hechos estos ocurridos en las recientes elecciones presidenciales de ese País.
En USA, el presidente Donald Trump hace lo mismo, tiene en boca a Venezuela en todos los estados que visita en campaña, y no deja de expresar que los demócratas son comunistas, que hay que evitar que EEUU se vuelva otra Venezuela, sin comida, sin respeto a derechos humanos, sin persecución, hambre, miseria, migración, etc. Dicho en otras palabras, nuestro país es el coco para el niño cuando no quiere probar la comida. Venezuela es pintada como algo tenebroso, feo y oscuro para jamás ser visitado, en eso hemos quedado en el Mundo, para que nos tomen de muestra del mal ejemplo. Así son las cosas, más claras y evidentes imposible.
En EEUU esta comparación o símil como estrategia electoral, le está dando un gran empuje a los candidatos republicanos de Donald Trump en su campaña por el senado, los representantes de la cámara baja y los gobernadores que se elegirán este 6 de noviembre.
LOS MECANISMOS DE CONSULTA BIEN
APLICADOS GENERAN ACIERTOS
Para ilustrar más
nuestro mecanismo de consulta hablemos del Call Tracking.
Esto es una tecnología que nos permite optimizar nuestras campañas de
publicidad, pudiendo medir mediante el sistema de analítica telefónica cualquier evento en cualquier parte del mundo.
Gracias al Call Tracking, podemos tener el control
absoluto de nuestras campañas de marketing y efectividad en los sondeos de
opinión, reduciendo así costos de investigación y operatividad.
Las encuestas telefónicas en vivo, operan con un entrevistador que le hace la o las preguntas a un encuestado por teléfono.
La mayoría de las encuestas telefónicas realizadas por entrevistadores en vivo, incluyen tanto teléfonos fijos como celulares, en nuestro caso solo usamos los teléfonos fijos. La mitad de los hogares de los EEUU no tienen un teléfono fijo, por eso la data telefónica debe establecerse en estados que reflejen lo que va a ocurrir, sin perder tiempo y esfuerzo en otras geografías electorales. Allí está el secreto, descubrir cuales son estas.
Las encuestas telefónicas en vivo, operan con un entrevistador que le hace la o las preguntas a un encuestado por teléfono.
La mayoría de las encuestas telefónicas realizadas por entrevistadores en vivo, incluyen tanto teléfonos fijos como celulares, en nuestro caso solo usamos los teléfonos fijos. La mitad de los hogares de los EEUU no tienen un teléfono fijo, por eso la data telefónica debe establecerse en estados que reflejen lo que va a ocurrir, sin perder tiempo y esfuerzo en otras geografías electorales. Allí está el secreto, descubrir cuales son estas.
HACER LO
IMPOSIBLE, PERO DEBE HACERSE DE VERDAD Y CON PASIÓN
Fue una tarea ardua y laboriosa conciliar y tabular esta encuesta, Utilizamos
además un método especial de nuestra creación estadística, en la tabulación del
material recopilado, basado en el valor agregado que genera la pregunta, que
nos permitiera poder clasificar con toda lógica y entendimiento, las respuestas
lo más ajustado posible a la realidad de su verdadera intención del voto. De
esta forma pudimos concretar las dos encuestas que se habían programado. La
entrevista en la consulta fue en vivo, no automática, con ello logramos
precisar y depurar más la opinión del entrevistado, sin embargo, el sistema
electoral de EEUU no deja de ser algo muy engorroso y complicado,
que hasta los propios electores norteamericanos, siempre exigen cada vez que se
realizan elecciones, una guía explicativa de como votar y ejercer su derecho
constitucional.
Recalcamos que no escapa esa misma dificultad para quienes ejercemos funciones de consultores de opinión, y tenemos que lidiar con la confusión generalizada de los electores que son nuestros entrevistados.
A pesar de todo logramos cifras en los (13) estados péndulos o bisagras, llamados así porque con sus votos van y vienen, es decir, en un proceso votan por los demócratas y en el siguiente se cambian para los republicanos, y vuelven después a votar nuevamente por los demócratas. Un ciclo corto con retorno alternativo entre una y la otra opción, como anden ellos, andará el país y los procesos eleccionarios, de allí que nuestra consulta se centró y se hizo en dos partes, siendo una de ellas los (13) estados péndulos de Estados Unidos.
Recalcamos que no escapa esa misma dificultad para quienes ejercemos funciones de consultores de opinión, y tenemos que lidiar con la confusión generalizada de los electores que son nuestros entrevistados.
A pesar de todo logramos cifras en los (13) estados péndulos o bisagras, llamados así porque con sus votos van y vienen, es decir, en un proceso votan por los demócratas y en el siguiente se cambian para los republicanos, y vuelven después a votar nuevamente por los demócratas. Un ciclo corto con retorno alternativo entre una y la otra opción, como anden ellos, andará el país y los procesos eleccionarios, de allí que nuestra consulta se centró y se hizo en dos partes, siendo una de ellas los (13) estados péndulos de Estados Unidos.
QUIENES SE VAN A ELEGIR EN ESTAS ELECCIONES LEGISLATIVAS
Se les llaman elecciones de medio término, porque se
efectúan dos años antes de las presidenciales y dos años después de las
presidenciales, es decir están ubicadas en el medio de cada elección
presidencial.
Se elegirán (34) senadores, (435) miembros de la Cámara de Representantes y los gobernadores en (34) estados. ¿Cómo se obtiene la mayoría en estos cuerpos deliberantes?.
Para que un partido tenga el control del Congreso debe contar con (218) escaños en la Cámara de Representantes, y actualmente los republicanos cuentan con (245) y los demócratas con (190) congresistas. En el Senado en la actualidad hay (51) escaños ocupados por republicanos, (47) por demócratas más dos (2) independientes que siempre se inclinan y votan por los demócratas. Se necesitan (51) senadores para gozar de una mayoría en el Senado. De los(50) estados de Estados Unidos, el Partido Republicano controla (33) gobernaciones, el Partido Demócrata tiene solo (16) y, solo (1) estado (Alaska) tiene un gobernador independiente.
Se elegirán (34) senadores, (435) miembros de la Cámara de Representantes y los gobernadores en (34) estados. ¿Cómo se obtiene la mayoría en estos cuerpos deliberantes?.
Para que un partido tenga el control del Congreso debe contar con (218) escaños en la Cámara de Representantes, y actualmente los republicanos cuentan con (245) y los demócratas con (190) congresistas. En el Senado en la actualidad hay (51) escaños ocupados por republicanos, (47) por demócratas más dos (2) independientes que siempre se inclinan y votan por los demócratas. Se necesitan (51) senadores para gozar de una mayoría en el Senado. De los(50) estados de Estados Unidos, el Partido Republicano controla (33) gobernaciones, el Partido Demócrata tiene solo (16) y, solo (1) estado (Alaska) tiene un gobernador independiente.
AHORA FINALMENTE
ANALICEMOS ESTADÍSTICAMENTE LAS PROBABILIDADES DE LAS DOS (2) OPCIONES. (Republicanos y Demócratas)
En el Senado
En el Senado
En la Càmara de Representantes (Congresistas)
En las Gobernaciones
En las Gobernaciones
NUESTRAS
CONSIDERACIONES Y CONCLUSIONES SOBRE ESTAS ELECCIONES LEGISLATIVAS EEUU 2018
Consideraciones:
No resulta nada sencillo para los demócratas, no contar con el gobierno a su favor en esta ocasión, pues este está ahora en manos republicanas con Donald Trump a la cabeza.
Los demócratas además tienen la carga impositiva muy fuerte ahora, que ya señalamos al principio, carga que le tocó soportar a los republicanos en el 2016. Ahora la situación está invertida, pero con muchos elementos a favor de los republicanos.
No cabe duda alguna que los republicanos cuentan con ventaja a la hora de sopesar las posibilidades y probabilidades por separado. Veamos las fortalezas y debilidades de ambas opciones en cifras, y con la distribución del haber de cada opción.
Consideraciones:
No resulta nada sencillo para los demócratas, no contar con el gobierno a su favor en esta ocasión, pues este está ahora en manos republicanas con Donald Trump a la cabeza.
Los demócratas además tienen la carga impositiva muy fuerte ahora, que ya señalamos al principio, carga que le tocó soportar a los republicanos en el 2016. Ahora la situación está invertida, pero con muchos elementos a favor de los republicanos.
No cabe duda alguna que los republicanos cuentan con ventaja a la hora de sopesar las posibilidades y probabilidades por separado. Veamos las fortalezas y debilidades de ambas opciones en cifras, y con la distribución del haber de cada opción.
ANALICEMOS LA CÁMARA ALTA (EL SENADO DE USA)
EN CIFRAS.
Tanto Demócratas como Republicanos tienen senadores que se van a elegir en esta elección, como también otros que no se elegirán en la misma, y esos representan ya una BASE de arranque para cada una de las dos opciones. Dos senadores independientes también irán a elección. Quien obtenga (51) senadores tendrá la mayoría en el Senado.
Tanto Demócratas como Republicanos tienen senadores que se van a elegir en esta elección, como también otros que no se elegirán en la misma, y esos representan ya una BASE de arranque para cada una de las dos opciones. Dos senadores independientes también irán a elección. Quien obtenga (51) senadores tendrá la mayoría en el Senado.
Los demócratas tienen (24) senadores de BASE,
es decir cuentan ya con estos porque no
van a ELECCIÖN, pero tendrán que defender (23) escaños o senadores en elección frente los republicanos, y aspirar que los dos
independientes resulten ganadores, pues siempre estos votan con los demócratas,
lo que les daría un total de (25)
escaños. No pueden perder ninguno. Ahora bien (25) más (24) que son ya BASE,
da un total de (49) senadores que
son los que actualmente tienen en la Cámara Alta o Senado de EEUU. Para que los
demócratas puedan controlar el Senado, necesitan ganar esos (25) que les corresponde defender, y
además ganarle mínimo (2) senadores
a los republicanos de las (9) defensas
que estos deben hacer, solo así lograrían una mayoría de mitad más uno, cosa que resulta bastante difícil, no es
fácil.
Los republicanos por su parte tienen
(42) senadores de BASE, es decir cuentan ya con estos porque no van a elección. Deben defender solo (9) escaños, todos en estados o territorios que ganó Donald Trump, lo
cual limita las probabilidades de victoria de los demócratas.
Un primer escenario sería el siguiente: Si los republicanos ratifican las victorias obtenidas en el 2016 en esos (9) estados tendrán (51) senadores, al adicionarles los (42) que tienen de Base porque no les toca elección, en consecuencia habrán ganado el Senado automáticamente, tendrían con ello la mayoría de los escaños y control de la cámara Alta.
Otro escenario sería: Si los demócratas en sus (23) defensas en elecciones, pierden uno, dos o tres escaños en estados donde ganó abiertamente Donald Trump, el balance daría mayor amplitud de victoria a los republicanos. Estos estados o escaños pueden ser en INDIANA en donde Trump ganó por (19.3) pts de diferencia sobre Hillary Clinton, MISSOURI ganado por Trump con (19.1) pts de diferencia sobre Hillary Clinton, y OHIO ganado por Trump con una diferencia de (8.6) pts. Estos tres estados o en otras palabras, estos (3) escaños “DECIDIRÁN” de perderlos los demócratas y esto es altamente probable. El balance final ocurriendo este escenario sería el siguiente:
Un primer escenario sería el siguiente: Si los republicanos ratifican las victorias obtenidas en el 2016 en esos (9) estados tendrán (51) senadores, al adicionarles los (42) que tienen de Base porque no les toca elección, en consecuencia habrán ganado el Senado automáticamente, tendrían con ello la mayoría de los escaños y control de la cámara Alta.
Otro escenario sería: Si los demócratas en sus (23) defensas en elecciones, pierden uno, dos o tres escaños en estados donde ganó abiertamente Donald Trump, el balance daría mayor amplitud de victoria a los republicanos. Estos estados o escaños pueden ser en INDIANA en donde Trump ganó por (19.3) pts de diferencia sobre Hillary Clinton, MISSOURI ganado por Trump con (19.1) pts de diferencia sobre Hillary Clinton, y OHIO ganado por Trump con una diferencia de (8.6) pts. Estos tres estados o en otras palabras, estos (3) escaños “DECIDIRÁN” de perderlos los demócratas y esto es altamente probable. El balance final ocurriendo este escenario sería el siguiente:
Demócratas…(23) escaños de Base,
menos estos tres (3) estados o escaños que les mencioné perdidos, quedarían con
(20) senadores o escaños, más los (24) de Base que no irán a elecciones
da (44) , más los dos Senadores independientes que
siempre votan con los demócratas sería entonces (46) en total, con lo cual perderían con los republicanos quienes
obtendrían (54) escaños automáticamente si
ganan los (9) escaños en sus territorios, en donde solo un estado de ellos (Nevada), estuvo apenas por (2.4) pts de diferencia de Trump sobre
Hilary Clinton en las elecciones del 2016, pero este estado tiene además un
gobernador republicano. Escenarios probables al Senado:
Republicanos (42) de Base + (9) defensas = (51)….Demócratas (49) ganando ambas opciones “todas
sus defensas en elecciones”.
Quedarían tal cual como están conformados actualmente. Hay
que resaltar lo siguiente, los republicanos solo defenderán sus (9)
elecciones al Senado en territorios ganados fácilmente por Trump en el 2016.
Una real y gran ventaja que pesa kilates.
Escenarios
probables si los Demócratas pierden uno o más de estos estados (INDIANA,
MISSOURI u OHIO)
Republicanos (54)…..Demócratas…(46)…Cuadro si perdieran los (3)
Republicanos (53)….Demócratas…(47)….Cuadro si perdieran solo (2)
Republicanos (52)…Demócratas….(48)…Cuadro si perdieran solo (1)
En nuestras encuestas estos tres (3) estados nos dan para
que los demócratas los pierdan.
La
alta probabilidad es: Republicanos (54)…Demócratas…(46)
En conclusión:
EL SENADO LO GANARÁN LOS REPUBLICANOS
AHORA HABLEMOS DE LA CÁMARA DE REPRESENTANTES:
Como está conformada actualmente:
Republicanos
(245) congresistas…..Demócratas (190) congresistas.
La mayoría se
logra con (218) congresistas.
Para que los republicanos pierdan el control de la Cámara de
Representantes, deben perder (28)
congresistas de los que actualmente tienen, esto sería un
escenario difícil de que ocurra teniendo ellos el control del gobierno
actualmente, si llegaran a perder (27) congresistas obtendrían los (218) congresistas
suficientes para tener la MAYORÍA y control de la Cámara. En cambio los demócratas que tienen
ahora (190) congresistas necesitan ganar
justo (28) escaños para alcanzar los
(218) con los que harían la mitad más uno que es la mayoría. No es nada fácil. No
es lo mismo ganar más escaños para
poder alcanzar el objetivo (caso de los demócratas), que proteger y
conservar lo ganado para no perderlo (caso de los republicanos) esto
último.
Teniendo el poder Donald Trump y la fuerza de (245) congresistas activos en la actualidad,
resulta un tanto cuesta arriba y pesada carga para los demócratas obtener el
control de la Cámara de Representantes.
En nuestras encuestas nos da
una pérdida probable de (13) congresistas republicanos, siendo esta elección
de las tres pautadas (Senado. Cámara de
Representantes y Gobernadores), sin lugar a duda el evento electoral en donde los demócratas harán su mejor papel, porque
involucra electoralmente a todos los (435)
escaños que la conforman, y eso a su vez motiva a todos los estados de
EEUU, mientras que la elección del Senado y Gobernadores son en algunos estados
que en esta ocasión van a elecciones.
Es aquí en este evento donde los demócratas pueden
reducir la diferencia republicana que existe en números entre las dos opciones, diferencia lograda
desde el 2016 con la obtención de (55) congresistas por encima de los demócratas.
Ahora los demócratas pueden alcanzar (32) congresistas
nuevos y pasar de (190) actuales a (203), logrando con ello aumentar su fuerza y
descontar la diferencia
existente a tan solo (23) escaños que serían nuevos.
Es precisamente en estas elecciones de congresistas donde
puede ser electoralmente afectado, evaluado y juzgado Donald Trump y su acciones de gobierno.
Expresado de otra manera, la elección de la Cámara de
Representantes se realizará en todo el País, y se elegirán todos los (435) congresistas que conforman la Cámara de
Representantes en EEUU, por eso esta elección es importante porque involucra a
todo el País. Aquí es donde el desgaste del gobierno de Donald Trump, podría evidenciarse con mayor claridad y
notoriedad, pero indudablemente al final esta afección no impedirá que los republicanos logren la mayoría de la cámara de
representantes, por cuanto la diferencia de lo que se ha logrado, con
relación a lo que se busca y aspira lograr, es menos exigente que la lucha que
tendrán que librar los demócratas para obtener la victoria y el control de la
Cámara.
La probabilidad dependiente de nuestras encuestas nos
arroja el siguiente escenario
“tentativo”: Tomando en cuenta los valores de nuestra encuesta,
se genera un número de pérdida de (13)
escaños que genera lo siguiente:
Republicanos….(232) congresistas…Demócratas…(203)
congresistas, de un gran total de (435) congresistas que van a elecciones en USA.
En conclusión:
LA CÁMARA DE REPRESENTANTES QUEDARÁ EN
MANOS DE LOS REPUBLICANOS, AUNQUE CON
UN MÁRGEN AJUSTADO, POR CUANTO LOS
DEMÓCRATAS EN SU VOTACIÓN NACIONAL HAN
DEMOSTRADO FUERZA, Y LA MISMA SE
PERCIBE EN
NUESTRAS ENCUESTAS REALIZADAS A ESCASOS
DÍAS DE LAS ELECCIONES.
AHORA
HABLEMOS DE LA ELECCIÓN DE GOBERNADORES en USA:
Como está esquema conformado actualmente?:
Republicanos..(33) gobernadores…Demócratas…(16) gobernadores
Más (1) gobernador
independiente.
Total
en el País…(50) gobernadores.
Los republicanos tienen
de sus (33) gobernadores, (12) de ellos van por la
re-elección, mientras los demócratas
tienen de sus (16) gobernadores, (5) que van por la re-elección. Esto
sería una ventaja para los demócratas, pero sino tienen el control del gobierno
nacional, la gente votará por quien seguro va a tener respaldo del gobierno
nacional o central, existe mayor incentivo en votar por alguien que continuará
en el poder, y que va a recibir la ayuda directa y fluida de Donald Trump en
buen entendimiento porque ambos son republicanos.
Las comunidades interpretan la seguridad de bienestar
cuando un gobernante recibe la ayuda del gobierno central, lo cual induce que
solo votando por un republicano en re-elección para gobernar el estado, con
ello se pueden solventar los problemas
de la región con mayor rapidez y seguridad. Ese es un planteamiento central de
los entrevistados, que representa un valor agregado a su respuesta en la
entrevista, cuando lo abordamos con nuestra pregunta en la encuesta.
Las comunidades miden el “feed back y la conexión directa”
que tiene el candidato con el gobierno nacional, y como se hayan evidenciado con
mayor fuerza en cada región, más contundente será la influencia de Donald Trump
al momento del ejercicio del voto por parte de los ciudadanos norteamericanos.
Los republicanos
tienen de los (13) gobernadores que VAN A ELECCIONES SIN RE-ELECCIÓN, de ellos en (8) estados los ganó Donald Trump con una diferencia mínima que va desde
(5.9) pts hasta una
máxima de (47.6) pts sobre Hillary Clinton,
Los
republicanos tienen además en los (12)
estados que van POR LA RE-ELECCIÓN, en (9)
de ellos ganó Donald Trump y en (7) de esos (9)
los ganó con una diferencia que va desde (9.3) pts hasta una máxima con (28.3) pts sobre Hillary Clinton.
GRAFICANDO
TODO ESTO TENEMOS LO SIGUIENTE:
Los
republicanos tienen para competir y defender:
(8) estados sin RE-ELECCIÓN con dif de
(5.9) mín hasta (47.6) pts máx
(7) estados con RE-ELECCIÓN con dif de
(9.3) mín hasta (28.3) pts máx
(7) estados en donde NO HABRA ELECCIÓN
DE GOBERNADORES SON BASE, ya están
electos desde el 2016. Esto da (22)
gobernadores.
Contar con
esta potencialidad de (22) gobernadores republicanos, sería tener un pie
en el camino de la victoria, porque con solo lograr (4) gobernadores
más, los republicanos obtendrían la mayoría de los gobernadores en
EEUU y habrán ganado esta contienda.
Todo no
termina allí, porque los republicanos tienen esos probables (4) estados o gobernadores que les hace falta en las
siguientes entidades que ganó Donald
Trump en 2016, (Michigan,
Wisconsin, Florida y Arizona), en estos tiene una diferencia
Donald Trump sobre Hillary Clinton que va desde (0.3) mínima hasta (4.3) pts
máxima por encima Trump de Hillary Clinton.
En nuestra
encuesta de los estados “péndulo” o “bisagras”, existe en la fuerza republicana estos cuatro
estados que le darían a este partido la mayoría de gobernadores en EEUU.
Siendo así veamos:
(8) GOBERNADORES EN ELECCIONES SIN
RE-ELECCIÓN
(7) GOBERNADORES EN ELECCIONES CON
RE-ELECCIÓN
(7) ESTADOS CON GOBERNADORES DONDE NO
HABRÁ ELECCIONES Y SON LA BASE
(4) ESTADOS FINALMENTE GANADOS POR
TRUMP CON DIFERENCIA QUE VA DESDE (0.3) PTS A (4.3) PTS
TODO ESTO
REPRESENTA (26) GOBERNADORES
Como seían los escenarios probables a partír de esos (26) gobernadores
ESCENARIO MÍNIMO 01
REPUBLICANOS....……DEMÓCRATAS…….INDEPENDIENTE
(26) (23)
(1) = 50
ESCENARIO MÁXIMO
02
REPUBLICANOS....……DEMÓCRATAS…….INDEPENDIENTE
(28) (21)
(1) = 50
EN CONCLUSIÓN:
LOS REPUBLICANOS OBTENDRÁN LA MAYORÍA
DE LOS GOBERNADORES EN ESTAS ELECCIONES
LEGISLATIVAS DEL 2018 EN EEUU